Los galos subieron de nueva cuenta a lo más alto del podio tal y como lo hicieron hace cuatro años en Beijing 2008, cuando derrotaron a Islandia; dos finales y dos medallas de oro demuestran que los franceses saben ganar el juego decisivo.
En tanto, el combinado sueco de nueva cuenta sufrió el maleficio en una final y sigue sin subir a lo más alto del podio, pues por cuarta ocasión en su historia se tuvo que conformar con la medalla de plata en el handball varonil de una justa veraniega.
Duelo de poder a poder protagonizaron los dos conjuntos en busca del título olímpico, pero lamentablemente tenía que existir un perdedor y ese fue el cuadro escandinavo, al que los postes le quitaron dos goles, sumado al buen trabajo del portero Thierry Omeyer, quien tuvo 11 salvadas vitales.
Por su lado, los franceses mostraron mayor tino sobre la meta custodiada por Johan Sjostrand, además de que apenas perdieron 12 pelotas.
El juego defensivo lució en el primer lapso, pues entre los dos conjuntos apenas se marcaron 18 goles, pocos en una disciplina como el balonmano. Ganó 10-8 el combinado francés.
En los segundos 30 minutos de partido los galos cayeron 13-12, pero esa reacción no le alcanzó a los suecos a pesar del buen accionar de Niclas Ekberg, quien con seis goles fue el máximo anotador del encuentro.
Francia mostró mayor puntería con remates desde los nueve metros al anotar ocho dianas, en tanto que Suecia fue eficaz desde los seis metros de distancia.
Un gol fue la diferencia, Kim Ekdahl puso el 21-22 a los 59:37 minutos, y con escasos 27 segundos por delante a él y a sus compañeros ya no les dio tiempo de empatar para forzar al tiempo extra. unomásuno D.R 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario